Inmigracion: Un Largo Camino A Casa
Por Hernan Molina
Si la reforma migratoria fuera un juego, y el mismo requiriera buscarle un nombre de pelicula, "UN LARGO CAMINO A CASA" seria seguramente el titulo mas apropiado. Despues de casi 2 años de especular con que el proyecto legislativo de reforma migratoria se convertiria en ley, los Republicanos insisten en buscarle la quinta pata al gato a la reforma para no tener que "sufrir" un disgusto en la Camara de Representantes.
Disgusto porque el Presidente de la Camara, el Republicano John Boehner sabe que su partido esta divido basicamente en dos bandos. Por un lado estan los Republicanos moderados, casi pragmaticos, que entienden que una reforma migratoria es no solo necesaria, sino tambien imprescindible para mostrarle a los inmigrantes, y en particular a los Latinos, que su partido la tiene clara y que entienden los deseos del electorado. Por otro lado estan los conservadores miembros del Tea Party que anteponen ideologias rigidas a cualquier accion legislativa que pueda dar paso a un compromiso entre los dos partidos. Son tan conservadores y extremos que gente como John McCain parecen casi progresistas al lado de ellos.
En el juego matematico de la mayoria necesaria para convertir un proyecto legislativo en ley, los miembros del Tea Party saben que tienen suficientes votos para hacer fracasar cualquier compromiso que de una vez por toda legalize a mas de 11 millones de inmigrantes. Muchos de los Republicanos que se los puede considerar moderados no quieren saber nada de votar un proyecto de reforma porque saben que tarde o temprano los activistas del Tea Party los enfrentaran en las primarias, y por ende pondrian sus bancas en juego. El amor por el projimo, sobre todo el de un inmigrante, es limitado y muchas veces escaso.
Por su parte, los Democratas, que sienten la presion ejercida por organizaciones civiles pro inmigrante, las cuales estan altamente frustradas con el presidente Obama por el record historico de deportaciones, saben que necesitan aprobar, y cuanto antes, un proyecto de reforma integral, que incluya un camino a la ciudadania.
Los Democratas saben tambien que si bien los Hispanos votaron masivamente al partido Democrata, no pueden darse el lujo de seguir esperando y ser puestos contra las cuerdas por la inaccion y obstruccionismo Republicano. Por eso, hacen todo lo posible para que quede bien en claro que si no hay una reforma no es por falta de iniciativa si no por falta de apoyo; apoyo que en la realidad se encuentra en la Camara de Representantes del Congreso de Estados Unidos se donde los votos Republicanos son imprescindibles para que el proyecto sea tratado primero en comision y despues en el pleno de la Camara. En el Senado, los Democratas tienen mayoria, por ahora, y un proyecto como este pasaria hasta con los votos de algunos senadores Republicanos.
2014 es y sera un año decisivo para los dos partidos ya que se juegan las mayorias de ambas camaras en las elecciones de medio termino que se celebraran en Noviembre. Por su parte, los Democratas aspiran a conservar la holgada mayoria que tienen en el Senado y a desbancar a algunos representantes del partido Republicano en la Camara baja. Los Republicanos por su parte aspira a reducir o eliminar la mayoria Democrata en el Senado y a ampliar la mayoria Republicana en la Camara de Representantes. Y si la suerte lo acompaña a Bohener puede que acote el poder del Tea Party y asi poder liderar un grupo de representantes Republicanos mas homogeneo, que le traiga menos dolores de cabeza.
Sea como fuere, la ley de inmigracion del año 1986 necesita ser enmendada para reflejar las necesidades contemporaneas del pais y para darle respuestas a los mas de 11 millones de indocumentados viviendo en Estados Unidos. No solo es justo para toda esta masa de gente que vive en la penumbra de la lay, sino que es necesario para el futuro de nuestro pais.